viernes, 31 de marzo de 2017

Mermelada Casera de Mango, Piña y Jengibre


Hola a todos!

Os presento hoy esta mermelada casera de mango con piña y un toque de jengibre.

Fué la mermelada que acompañó a mi Tarta de Queso "auténtica" en la pasada feria de queso de cabra malagueña el 12 de Marzo, y como lo prometido es deuda, aquí tenéis la receta.

El mango es una de mis frutas favoritas, su dulce sabor, su suave textura y su exótico olor, son cualidades que hacen que me encante.
Además de estar delicioso, el mango resulta una fruta muy agradecida a la hora de envasar como mermelada, ya que espesa de forma natural. 
Debido a su dulzor natural, casi no es necesario añadir demasiada azúcar y como su sabor resulta suave y discreto, decidí en esta ocasión añadirle piña y jengibre, para darle un toque de alegría.

Ingredientes:
700 gr. de mango (aprox. 3 mangos maduros)
200 gr. de piña
400 gr. de azúcar moreno
Un trozo de jengibre
Zumo de un limón



Preparación:
Se trituran las frutas (el jengibre va rallado), se añade el azúcar y el zumo de limón.
Se cuece a fuego lento aproximadamente 40 minutos, removiendo.

*Mientras, hervimos los botes y las tapaderas, en los que vamos a conservar la mermelada durante 20 minutos, cubriéndolos por completo de agua (así quedarán los botes esterilizados). 
Finalmente, los secaremos bien con papel de cocina.
Cuando la mermelada esté lista, rellenamos los botes, cerramos la tapa y damos la vuelta bocabajo para crear el vacío. Dejaremos unas horas así (cuando le demos la vuelta a los botes, la tapa estará herméticamente cerrada y sin sonido ni movimiento, lo que indica que hemos hecho correctamente el vacío).
Ya están listas para conservar y consumir.




Espero que os guste!


*Extraído de mi entrada Mermelada de Frutos del Bosque




jueves, 23 de marzo de 2017

Caldito de Puchero




Hola a todos!!

No hay nada más reconfortante que un caldito de caldo casero.
Por quí lo llamamos "Caldo de Puchero" y es una de las mejores opciones en los días de frío, para entrar en calor y quedarnos tan agusto.

Cuando llegamos algún domingo de haber estado todo el día fuera paseando, en el campo, o de excursión y no sabemos o no tenemos muchas ganas de ponernos a hacer la cena, ésta es una maravillosa opción. 
Normalmente, preparo una gran olla de caldo de puchero y el día que lo hago, saco para comer de primero, cocido (que son patatas cocidas en el caldo y garbanzos, los machacamos con el tenedor y aliñamos con sal y aceite de oliva) de segundo, comemos la carne cocida, que también aliñamos con sal y aceite.
El segundo día, tenemos sopa asegurada. 
El resto de caldo, lo preparo en fiambreras, para congelar y así queda listo para consumir en cualquier momento.

Me encanta este poema dedicado a la sopa, que hace tiempo escuchaba a Carlos Arguiñano, en su programa de cocina.

Siete virtudes tiene la sopa:
quita la sed y el hambre apoca,
hace dormir y digerir,
sienta bien, nunca enfada,
y te pone la cara colorada.


Si queréis ver la elaboración y los ingredientes que utilizo para hacerlo, podéis hacer click, en éste enlace.


Espero que os guste!!


miércoles, 15 de marzo de 2017

Tarta de Queso "Auténtica"

¡Hola a tod@s! Van pasando los días y aún sigo emocionada tras resultar ganadora del Primer Premio en el "IV Concurso de Tarta de Queso de Cabra Malagueña" que se celebró en Torre del Mar, el pasado domingo 12 de Marzo.
Este concurso, está dentro del 6º Mercado de Quesos de Cabra Malagueña y Vinos de la Axarquía, donde también se han expuesto productos de la tierra como miel, queso, aceite, dulces, chacinas...

Veréis, la receta de esta tarta de queso no es algo fortuito, sino el resultado de largo tiempo trabajando, modificando, probando y ajustando ingredientes, hasta encontrar el equilibrio adecuado entre ellos.

En parte debo esta afición a mi hermana Mari Ángeles (que nos dejó hace pocos años).
Ella siempre estaba en busca de la tarta de queso perfecta, tratando de encontrar el misterio que hacía que una tarta tan simple, fuera una verdadera delicia al paladar. 
Pues bien, yo he seguido ese camino que ella comenzó, y desde aquí hoy quiero dedicársela porque sé que la hubiera disfrutado tanto como yo (quien sabe si allá donde esté, de alguna manera me ha echado un cable).

En mi vertiente más minimalista, siempre he pensado que con muy pocos ingredientes, una simple tarta de queso, podía quedar tan deliciosa, que tras la primera cucharada, la mano se deslizara casi hipnotizada a por la segunda... y la tercera...etc. 
Precisamente, esta es la característica principal de esta tarta, que cuando empiezas, quieres seguir saboreándola una y otra vez y resulta difícil encontrar el momento oportuno para parar.

¿Y cómo fué esto de presentarme al concurso? 
Pues veréis, justamente hace dos semanas me habían entrado (de nuevo) esas ganas locas de hacer tarta de queso y ver si la combinación de ingredientes que tenía en mi cabeza en ese instante, esta vez era la acertada. Efectivamente, tras la primera tarta tuve que hacer una segunda, a petición familiar (esta vez, había dado en el clavo).
Empecé a preparar la entrada para mi receta de tarta de queso y mermelada de frutos del bosque, que dejé casi lista en borrador (la entrada era casi una oda a la tarta de queso tradicional, la básica, la sencilla, la de toda la vida, vamos).
Una tarta humilde sí, pero francamente espectacular, por eso decidí llamarla "Auténtica". 
Todo esto, sin saber que el concurso estaba ya en marcha. 

A la mañana siguiente, cuando entré en mis redes sociales, vi este cartel con esa cabrita tan mona, entonces pensé: ¿casualidad?¿destino?¿el universo se está confabulando para que me apunte a este concurso? Todas las señales, indicaban que ese era el camino que había de seguir...Sea como fuere y tras consultarlo a mi familia, todos me apoyaron y me animaron a presentarme al concurso.

...Y bueno, así fue como me vi inmersa en esta aventura (he de confesar que algunos problemillas técnicos, me dificultaron el camino a la hora de inscribirme, pero finalmente conseguí salvar los obstáculos y llegar a concursar). 
Una vez allí, al descubrir nuestras tartas, pude ver el buen nivel que había. Tartas preciosas, algunas muy elaboradas, otras coloridas y brillantes, algunas rozando la perfección...tuve mis dudas, la verdad y estaba nerviosa, pero confiaba en que mi tarta sorprendería a más de uno por su sabor, textura y cremosidad.


No os puedo explicar el sentimiento de agradecimiento que viví cuando supe que mi tarta era la ganadora, pero os podéis hacer una idea. Saber que el jurado después de deliberar, decidió que mi tarta fuera la premiada, fue un momento realmente emocionante. Valoro muy positivamente este reconocimiento (confirma mi teoría minimalista en relación al "mundo tarta de queso" y mi oda a este humilde, pero exquisito manjar).

Bueno, pues como sé que algunos de vosotros ya estáis deseando conocer la receta, ahora mismo desvelo el secreto y la comparto con vosotros, sin esperar ni un minuto más.

Ingredientes:

600 gr. de queso de cabra malagueña (Sur del Torcal)
550 gr. de leche condensada
3 huevos (tamaño grande, XL)
3 Cucharaditas de harina de maiz (tamaño postre)
Una Cucharada de aroma de vainilla.

Preparación:

En primer lugar se precalienta el horno a 180º (ventilador y abajo) y mientras vamos preparando el molde (he cortado papel vegetal y lo he forrado para que se desmolde mejor)

Se trituran todos los ingredientes, hasta conseguir una masa cremosa y homogénea. 
En este caso yo he usado Thermomix, aproximadamente 1 minuto en velocidad progresiva 5-10, pero podéis usar cualquier tipo de batidora o robot de cocina.

Vertemos la masa en el molde y horneamos aproximadamente 45-50 minutos (estamos pendientes, para sacarla en cuanto cuaje y no dejarla más tiempo del necesario)

Dejamos enfriar antes de meter en la nevera.
En esta ocasión la he decorado con azúcar glass y una cabrita hecha con fondant y colorantes alimentarios.
La mermelada casera que acompaña a la tarta es de Mango, Piña y jengibre (en otra entrada os pondré la receta).
Me gustaría agradecer a todas las personas que han hecho posible este concurso. Cabrama, Axarquía me gusta, Ayuntamiento de Vélez-Málaga, Sabor a Málaga y a los colaboradores de puestos del 6º mercado de queso de cabra y vino de la axarquía. Sobre todo al pueblo de Torre del Mar y a su buena gente, por abrirnos las puertas de su casa.
Por último, me gustaría mencionar a las empresas colaboradoras que han puesto todos estos productos en la Cesta y agradecerles enormemente su regalo:

Cerveza artesana "La Axarcä" (Frigiliana)
Vino Dulce Moscatel "Ribera del Mudejar" (Árchez)
Vino "Moraga Sweet Blue" (Teba)
Miel de Flores del Bosque "La Alquería de la Sierra" (Casabermeja)
Mermelada Extra de Mango "Mango-go" (Frigiliana)
Mermelada de Mango "Mango de Málaga" (Vélez-Málaga)
Torta Blanda de "Panadería Manolín" (Alhama de Granada)
Roscos de Anís " Obrador de Pastelería y Repostería Artesana Rosario) (Cuevas de San Marcos)
Morcilla de Cebolla "Carnicería-Charcutería LOLI (Alhama de Granada)
Ristra de Chorizos "Carnicería-Charcutería LOLI (Alhama de Granada)
Queso de Cabra "El Pastor del Valle" (Alhaurín el Grande)
Queso de Cabra Semicurado "El Pinsapo Sierra de las Nieves" (Málaga)
Queso de Cabra "Quesería Artesanal LOS PEÑA" (Baena)
Queso de Cabra Viejo en Aceite "Cortijo el Aserradero" (Alhama de Granada)
Medio Queso Tierno de Cabra 
Tarrina de Ajobacalao untable (Vélez-Málaga)

Bueno, pues ya podéis hacer la receta (no tenéis excusa) y ya me contaréis qué tal os ha salido.



¡Un abrazo y hasta pronto!
¡Besos!






miércoles, 1 de marzo de 2017

Mermelada de Frutos del Bosque


¡Hola a todos! Aprovechando que estamos en temporada de fresas y que han bajado los precios de las bayas en el supermercado Lidl de mi pueblo, (por inauguración de reapertura) he hecho acopio de fresas, moras y arándanos para hacer una mermelada de frutos del bosque.

Me encanta su color burdeos, como si de un vino viejo se tratase. 
Su sabor ácido y aromático, se descubre tras el dulzor del azúcar.
La textura, resulta más ligera que una mermelada convencional. 
Todas estas cualidades hacen de ésta, una mermelada exquisita.


Ingredientes:
500 gr. de frutos del bosque (fresas, arándanos y moras)
1 manzana con piel y sin pepitas (para que ayude a solidificar, ya que contiene pectina en su piel)
500 gr. de azúcar (yo he usado azúcar moreno)
Zumo de medio limón

Preparación:
Se trituran las frutas y se cuece durante unos 40 minutos aproximadamente, junto con el azúcar y el zumo de limón (vamos observando hasta conseguir el punto adecuado). 
Mientras, hervimos los botes y las tapaderas, en los que vamos a conservar la mermelada durante 20 minutos, cubriéndolos por completo de agua (así quedarán los botes esterilizados). 
Finalmente, los secaremos bien con papel de cocina.
Cuando la mermelada esté lista, rellenamos los botes, cerramos la tapa y damos la vuelta bocabajo para crear el vacío. Dejaremos unas horas así (cuando le demos la vuelta a los botes, la tapa estará herméticamente cerrada y sin sonido ni movimiento, lo que indica que hemos hecho correctamente el vacío).
Ya están listas para conservar y consumir.




Me ha encantado su sabor intenso, se nota mucho la diferencia con las mermeladas compradas. Al destapar el bote la fragancia a fresa surge como nota dominante, le siguen el resto, las moras y arándanos.

Os recomiendo que la hagáis, es fácil y el resultado merece la pena.


Espero que os guste!






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