Alguien me habló de este pescado, el abadejo, el cual no había probado nunca.
Me contaron que su textura era similar al bacalao, con que no dudé en probarlo.
He de decir, que me sorprendió gratamente y efectivamente su textura me recordó al bacalao. De sabor suave y carne tierna, ausente de espinas, creo que este pescado va a ir a mi lista de favoritos, de cabeza.
Esta forma de elaborarlo es muy fácil ya que casi todo el trabajo lo hace el horno, pero no descarto probarlo de alguna otra manera.
4 filetes de abadejo descongelados
4 ó 5 patatas
2 ó 3 tomates
Varios dientes de ajo
Sal, aceite, orégano
Para la salsa alioli:
Aceite de oliva (3/4 partes de un vaso más o menos)
Un huevo
Un diente de ajo
Sal
Para preparar el alioli, sólo hay que poner todos los ingredientes en el vaso de la batidora e ir batiendo. Recomiendo empezar con medio vaso, en caso de que necesitemos más, solo tenemos que ir añadiendo.
Preparación:
Cortamos las patatas y los tomates en rodajas y los ponemos en la fuente, junto con los ajos pelados, un chorreón de aceite, sal y orégano. Lo dejaremos hornear aproximadamente media hora.
Pasado este tiempo ponemos el pescado y dejamos quince minutos más.
Finalmente, encendemos el gratinador y cubrimos el pescado con salsa alioli, dejamos dorar un par de minutos.
Recomiendo guardar un poco de alioli, por si algún comensal gusta de servirse un extra.
Espero que os guste!!